Descubren un dedo de 36 centímetros en una pirámide de Egipto

* En 1985 el explorador Gregor Sporri viajó a Egipto y encontró a un coleccionista que poseía un dedo momificado que medía 38.6 centímetros de largo, lo que equivaldría más o menos al tamaño de un brazo humano actual.

* A través del análisis, se pudo confirmar que el dueño del dedo debió medir 3.6 metros de altura.

* Nunca nadie pudo explicar el fenómeno, pero tampoco fue posible desacreditar al dedo.

Un dedo gigante descubierto en Egipto podría ser la evidencia perfecta para demostrar que los gigantes caminaron entre los Egipcios.

En 2012, el medio de comunicación alemán Bild.de Escribió sobre un dedo gigante momificado de 38.6 centímetros descubierto en el año 1985.

El dedo fue encontrado en una pirámide a 100 kilómetros al noreste de el Cairo por el explorador suizo Gregor Spörri, quien aseguró; el dedo estaba envuelto en trapos viejos.

«¡Me quedé completamente asombrado cuando vi el dedo marrón oscuro!».

Dijo Spörri al medio de comunicación alemán.

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Según Spörri, se le permitió tomar el dedo en sus manos para tomar algunas fotos, sin embargo, se le prohibió llevar el hallazgo a un laboratorio para un estudio profundo.

El dueño del dedo era, según Gregor Spörri, un ladrón de tumbas que encontró la pieza en una pirámide en Egipto.

Algunos investigadores creen que el dedo tendría que pertenecer a un individuo de más de 3.6 metros de altura.

Spörri declaró:

"Lo pude coger para tomarle fotografías, además de colocar un billete junto a él para poder comparar su tamaño. El dedo ya se estaba partiendo, y estaba cubierto con una capa de moho. También me llamó la atención su peso: era sorprendentemente liviano, tal vez de unos pocos cientos de gramos. La criatura que tuviera unos dedos así de grandes tenía que tener al menos una altura de 4 metros…"

En 1988, Spörri mostró las fotos a varios científicos, pero no las tomaron en serio o no creyeron en su autenticidad. Según Gregor, la persona que poseía el dedo tenía imágenes de rayos X de la década de 1960.

Sporri volvió a Egipto en 2009, con la intención de encontrar algún indicio que lo llevara a descubrir a la criatura gigante, dueña del dedo.

Pero por desgracia, el anciano que permitió a Spörri tomar las fotos del "dedo gigante" ya había fallecido. No obstante, para los científicos y teóricos de la evolución, el dedo no encaja en ninguna de las líneas temporales de civilizaciones presentadas por historiadores.

Entonces...

¿Crees que el dedo encontrado por Sporri, sea una clara evidencia de la existencia de gigantes en la Tierra en tiempos remotos?

Todo es posible, siempre y cuando no haya pruebas que indiquen lo contrario.

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Redacción

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